2/22/2016

Apocalypse World. Capitulo II




Capitulo II
Blues

La motera observa desde la barra. Observa la gresca que están armando sus chicos, haciendo cabalas mentales sobre si tendrá que volver a meterlos en vereda esta noche. Observa la reyerta de Larry con el borracho que va perdiendo naipes por la manga de su frac raído y manchado de vomito. Ha enviado a dos de sus mejores hombres a ocuparse del tema, aunque sospecha que pueden haber malinterpretado sus ordenes. Observa también al resto de parroquianos, intentando discernir si alguno puede suponer un problema en el futuro. Pero sobre todo, observa al hombre de negro mientras camina de vuelta hacia el taburete situado a su izquierda. Se da perfecta cuenta de que el hombre la examina con la misma intensidad que ella a el, pero no le resulta extraño: Está acostumbrada a ser el centro de todas las miradas. Lo que si le resulta inquietante es que ese hombre en concreto no aparte la mirada de sus ojos... Generalmente es lo ultimo en lo que se fijan los hombres. Tiene unos ojos preciosos, pero la batalla por la atención generalmente la ganan su cuerpo voluptuoso enfundado en cuero y su generoso escote.

-Señorita Blues... -Saluda Marte con una leve inclinación de cabeza mientras toma asiento a su lado.

-¿Como sabe mi nombre? .-Pregunta recelosa.

-Me lo dijo usted. -Blues no recuerda haber cruzado una palabra con el forastero durante el breve intercambio de saludos que ha mantenido con Larry, y aun no ha bebido tanto. Intenta leer en sus facciones si dice la verdad, pero no hay nada que leer. El tipo tiene la expresividad de un bloque de mármol.

-Creía que Larry le iba a indicar como llegar a un motel en la ciudad. -¿Por qué no se ha ido aún? ¿Que propósito oculto tiene para quedarse aquí? Son preguntas que pasan por su cabeza en apenas un instante. No puede evitarlo. Desde que se convirtió en la cabecilla de los "Sons of Davidson" su mente está condicionada para permanecer siempre alerta y suspicaz.

-Se supone que tengo que esperar aquí a que su camarero me de las susodichas indicaciones... Y ya de paso, no le haría ascos a una copa. Lastima que no haya nadie atendiendo la barra. -Como si hubiera estado esperando su entrada, en ese preciso momento les interrumpe una rubia encorsetada en un disfraz de conejita de playboy. Llega casi sin aliento, pero no espera a recuperarse antes de comenzar a disparar ráfagas de cháchara cargante con una irritante voz nasal:

-¡Ohdiosmio, ohdiosmio, ohdiosmio! ¿Lo has visto, Blues? ¡El puto Mike le ha partido la cabeza al jefe! ¡Se la ha reventado como si fuera un melón maduro! ¿Crees que sobrevivirá? ¡Ohdiosmio! -Lo dice como si fuese una única palabra. y lo repite como si fuera un mantra. Blues intenta interrumpir el monologo de la excitada camarera, pero no logra ver un resquicio por donde penetrar su inquebrantable armadura de verborrea. - ¿Que vamos a hacer ahora? ¿Quien crees que dirigirá el cotarro si no está Larry? ¿No crees que yo podría hacerlo muy bien? ¿Crees que será Red? Porque no creo que sea capaz... ¿Y quien tratará con el Sinrostro? al único que hace un poco de caso es a Larry...

-Si me disculpa, señorita: No creo que sea tan grave .-Le interrumpe Marte cuando finalmente tiene que hacer una pausa para recobrar el aliento. -Puede que la herida requiera unos pocos puntos, pero puedo asegurarle que la vida de Larry no corre peligro... -Marte posa su mano derecha en la espalda de la neumática rubia haciendo ademan de intentar tranquilizarla. Blues finalmente percibe un cambio en su expresión. Un leve entrecerrar de ojos antes de finalizar la frase.- ...Aún.

-¿Y tu quien coño eres? .-Inquiere ella de forma bastante impertinente.

-Un cliente .-Contesta Marte sin variar el tono .- Seria usted tan amable de servirme un martini?

-Claro .-Sin ni siquiera mirar lo que está haciendo, la camarera saca una cerveza del otro lado de la barra y se la planta a Marte en las narices. Blues tiene que hacer esforzarse por contener la risa. Está claro que el forastero no conoce a su adversaria o nunca le hubiera pedido nada que implicase un mínimo de trabajo.

Silver, cariño, ¿Me pones un tequila a mi? .-Sabe que tiene las misma probabilidades de conseguir lo que ha pedido que Marte (Si no menos, para atraer la atención de Silver hace falta algo que ella solo tiene entre las piernas ocasionalmente), pero no pierde nada por intentarlo.

-Lo siento, Blues. Tendrás que esperar a Red. Yo tengo mucho que hacer en la despensa. -Y sin esperar respuesta, Silver sale disparada hacia el fondo del casino. A Blues le parece que está algo más alterada que de costumbre, pero lo achaca a la pelea de antes.

-Joder, mira que es vaga la tía... .-Sentencia sin dirigirse a nadie en particular. De momento ha olvidado por completo a Marte .- Si no fuera porque respeto demasiado a Larry, cogería yo misma la botella de Tequila que tiene debajo de la barra .-Lo dice por decir, claro. Una cosa es saquear asentamientos de bandidos con su séquito de moteros y otra muy distinta robarle a un honrado camarero. De repente, siente un escalofrío al posarse la mano enguantada de Marte en la parte baja de su espalda.

-Coge lo que quieres. -Su aliento le llega cálido a la oreja y le eriza el vello en la nuca.

-Creo que cogeré la botella de todas formas, ricura .-Blues se sorprende a si misma saltando al otro lado de la barra y cogiendo la botella de tequila del caro que Larry guarda al lado de su recortada. Por un momento piensa que esa no es ella, que hay otra voluntad que se está imponiendo a la suya... No, no imponiendo. Solo eliminando ciertos bloqueos. Pero la sensación dura apenas una fracción de segundo, y para cuando saca dos vasos de chupito de la repisa ya la ha olvidado casi por completo.
Lleva un buen rato rato hablando con Marte como si fuesen viejos amigos y el nivel de la botella de tequila ha bajado peligrosamente cuando se da cuenta de que ha perdido por completo la noción de lo que pasa en el casino. Ninguno de los dos se ha percatado del ruido de cristales rotos que proviene del piso de arriba, ni han visto al hombre de la mascara kabuki seguir a Silver a la salida trasera. Todo parece estar bien. Las Shinning Stars (Dos bailarinas de strepteasse en la nomina de Larry) están supliendo al, a estas alturas ya difunto, Mike el Magnifico para regocijo de la clientela, mayoritariamente masculina, de "La teta". El ambiente no podría ser más relajado. Y justo entonces se oye la explosión.




4 comentarios:

Piteas dijo...

Muy chulo el capítulo y muy bien dotados los personajes. Me gusta mucho la atmosfera de "mierda incoming" que coge al final.

A ver que tal cuanto tires los quince quilos al ventilador.

Vernika dijo...

y boom... se convirtió en chocapic. Me ha sabido a poco, quiero más!!

LinaChan dijo...

Promete, promete xD

Wargo dijo...

El siguiente es considerablemente más largo, que ya comienza la acción propiamente dicha ^^